miércoles, 17 de abril de 2013

PRÁCTICA 2 - MÉTODOS Y TECNICAS CUANTITATIVAS.



PRÁCTICA 2 -  MÉTODOS Y TECNICAS CUANTITATIVAS.

El objeto de estudio es el “Riesgo de pobreza”. Se considera que se encuentran en riesgo de pobreza  las personas que viven en hogares con una renta inferior al 60% de la renta mediana equivalente nacional. 
El umbral de pobreza depende de la distribución de los ingresos por unidad de consumo de las personas.
La tasa de riesgo de pobreza es el porcentaje de personas que están por debajo del umbral de pobreza, es un claro indicador de cohesión social y del desarrollo de un país o región. El umbral de pobreza afecta especialmente a parados, jubilados e inactivos. Además existen fuertes diferencias entre las Comunidades Autónomas, Extremadura cuadriplica en porcentaje la población en riesgo de pobreza con respecto a la Comunidad de Madrid (37% frente a 9,5%), las que presentan tasa de riesgo de pobreza más altas son Extremadura, Andalucía, Canarias, Ceuta y Melilla. Por lo tanto se cuenta con una elevada tasa de riesgo entre la población española, acompañada por fuertes diferencias regionales. La tasa de riesgo de pobreza persistente se refiere a aquellos hogares que han estado dos de los últimos tres años por debajo de la línea del riesgo de pobreza. 

TABLA






En 2012 la tasa de riesgo de pobreza se sitúa en el 21,1% de la población residente en España, frente al 21,8% registrado en 2011. Se destaca la disminución de esta tasa entre personas mayores de 65 años que ha pasado del 21,7% en 2010 al 16,9% en 2012. Por otro lado, se puede ver que el porcentaje de población por debajo del umbral de la pobreza aumenta en las personas en edad de trabajar que se encuentran entre los 16 y 64 años de edad, pasando del 19,4% en 2010 al 21,0% en 2012. Uno de cada cuatro menores de 16 años se encuentra por debajo del umbral de la pobreza. También hay que destacar que hay una serie de factores que inciden en el riesgo de pobreza como por ejemplo el nivel de formación de las personas, en España el 28,9% de la población que ha alcanzado un nivel educativo correspondiente a la educación primaria o inferior se encuentra en riesgo de pobreza, cuando el grado alcanzado es la educación superior la tasa se sitúa en el 10%. 

En la tabla, al considerar los datos desagregados por sexo se puede observar por un lado que las tasas de los hombres son inferiores si la comparamos con la de las mujeres, lo cual quiere decir que el riesgo de pobreza afecta más a las mujeres. En 2011 por ejemplo la tasa de pobreza de los hombres cuenta con un 21,1% mientras que la de las mujeres un 22,4. Podemos ver que al año siguiente, en 2012, quedan más o menos igualadas, los hombres tienen una tasa de un 21,1 la cual no cambia mientras que en las mujeres disminuye el riesgo de pobreza con un 21,1, por lo que ambas han disminuido en este año. En cambio, en 2010, la de las mujeres era alta también, con una décima menos que en 2011.
También cabe destacar que el 2011 es el año que cuenta con las tasas más altas de riesgo de pobreza tanto en hombres como en mujeres si lo comparamos con el resto. Los años que se encuentran con mayor riesgo son las mujeres menores de 16 años, con un 28,0% y lo hombres con un 25,4%, de esta edad en adelante los porcentajes van bajando. 

Referencias bibliográficas:

-                            -   www.ine. Es
-                -  Tabla: www.ine.es/jaxi/tabla.do evolución de la tasa de riesgo de pobreza por edad y                  sexo.
-                              -  www.eapn.es/pobreza-exclusión-españa
-                              -   Wikipedia
-                             -    www.sostenibilidad-es.org/tasa de riesgo de pobreza y pobreza persistente










miércoles, 3 de abril de 2013

Práctica 1: artículo cualitativo


ESTRATEGIAS RESIDENCIALES Y PROCESOS DE RECOMPOSICIÓN FAMILIAR 

Ana Mª Rivas Rivas

En este artículo analizamos las elecciones y las prácticas residenciales que adoptan las familias reconstituidas como una estrategia para gestionar las relaciones entre hijos/as no comunes, las relaciones entre todos los miembros, y las nuevas parejas de padres y madres.

En cuanto a las unidades de análisis y la dimensión temporal y geográfica podemos decir que los datos empíricos en los cuales se apoya el artículo provienen de una investigación cualitativa realizada en la Comunidad de Madrid, en la que se hicieron 51 entrevistas semidirectivas a 17 familias reconstituidas con una media de tres entrevistas por familia. La muestra de las familias se diversificó según el nivel socioeconómico de los padres y madres de cada una de las familias.
En los resultados se concretó en el espacio habitacional como regulador de conflictos de diferentes culturas familiares que influyen en la nueva pareja, los cuales se deben gestionar.

En cuanto a la herramienta de recogida de información fue por medio de la entrevista, el criterio de selección  de los entrevistados fue bastante amplio, con una cierta heterogeneidad en las variables para la clasificación de las familias, teniendo en cuenta el estatus de la pareja, la residencia de los hijos, el tipo de custodia, el proceso de separación o de divorcio, la residencia temporal o habitual de los hijos no comunes, el nivel socioeconómico y sociocultural de la pareja y edad de los hijos. En las entrevistas se partió de un guión flexible y abierto que giró en torno a la reconstrucción de las trayectorias personales y las historias de las vidas familiares. Las entrevistas fueron grabadas y posteriormente transcritas para su análisis.
Uno de los objetivos que responde la elección residencial de las familias es el deseo de normalizar la situación adoptando así lo que consideran pautas comunes al modelo familiar.

Los resultados en la elección muestran varias elecciones residenciales, o vivir juntos o separados, mudarse uno a vivir a la residencia de la pareja o trasladarse ambos a una nueva vivienda, se van ajustando a las circunstancias personales de la pareja, lo cual puede variar.

En este estudio ha interesado analizar la residencia familiar en sí como una estrategia utilizada por los actores en el proceso de reconstrucción. En la reconstrucción de familias el problema se plantea fundamentalmente en casos en los que ambos tienen custodia compartida, también en parejas que al unirse han juntado hijos/as de otras relaciones anteriores, y se han ido creando conflictos, añadiéndole a esto las diferencias en hábitos, costumbres y normas. Hay una serie de conflictos, la prevención  de los conflictos entre los hijos no comunes de la pareja, la prevención de los conflictos entre hijos/as de la mujer y su nueva pareja y la prevención de conflictos del hombre y su nueva pareja.
En el caso de los conflictos entre los hijos no comunes de la pareja, el problema no proviene tanto del número de miembros en el hogar sino de la ausencia de vínculos previos entre ellas por lo que podrá ser una fuente de conflictos y rivalidades entre ellos. También puede provocar la comparación del comportamiento que cada padre o madre tiene con sus propios hijos. Una de las soluciones que se le puede dar a este problema es conseguir una vivienda con habitaciones suficientes para todos los miembros. También hay casos en los que cuando no es posible contar con una vivienda lo suficientemente grande la segunda opción que tiene la pareja es separar las casas, cada uno en la suya con sus respectivos hijos. Por otra parte se encuentran conflictos entre la nueva pareja de la mujer y los hijos de esta, una de las razones por las cuales surge el conflicto es debido no a que los hijos de la mujer tengan un problema de relación con la pareja sino que la vida de pareja se desarrolle en el mismo espacio en el que la madre había compartido con el padre de los hijos. En muchos casos la residencia separada es lo que hace salvar la relación de la pareja. El mismo caso se dará con los hijos del padre y su nueva pareja.

En las conclusiones se destacan las cuestiones que se plantean las parejas separadas o divorciadas con o sin hijos cuando deciden formalizar su nueva relación, es el modo de convivencia y el tipo de residencia. En las familias reconstituidas la unión pone en relación a un número mayor de personas de la primera unión, en las cuales puede haber conflictos o no.







Práctica 1: artículo cuantitativo.


CONVIVENCIA Y PARTICIPACIÓN DE JÓVENES EN SANT BOI DE LLOBREGAT (BARCELONA).

Berta Palou Julián
Mercedes Rodriguez Lajo
Ruth Vilá Baños

El punto de partida inicial del trabajo fue hacer una evaluación del grado de convivencia y participación de la juventud de edades comprendidas entre los 14 y 16 años, con la fin de poder fundamentar propuestas educativas de mejora en dichas áreas, necesarias para el desarrollo de una ciudadanía más activa y comprometida.

En cuanto al planteamiento del problema se destaca que las sociedades cada vez se hacen más complejas debido a su mayor diversidad cultural. Dichos cambios sociales y culturales dan la oportunidad de crear nuevas relaciones entre diferentes personas y pueblos que cada vez se hacen más complejos cuando se unen distintas religiones, tradiciones, lenguas... Algunos estudios muestran que jóvenes que viven en ambientes multiculturales tienen prejuicios hacia otros grupos culturales que en muchos casos hacen que se perjudique dicha convivencia.
Se parte de una hipótesis teórica, por la cual los jóvenes de Sant Boi de Llobregat, debido a la falta de participación y convivencia con otros jóvenes de diferentes culturas desarrollan en su mayoría un alto grado de prejuicios frente a estos individuos pertenecientes a diferentes culturas.

El objetivo principal de la investigación es conocer la opinión y la actitud de la juventud sobre la convivencia y la participación.
El objetivo en relación a la convivencia es conocer la opinión y la actitud que tienen los jóvenes de la diversidad cultural.
Y el objetivo en relación a la participación es conocer el concepto que tienen sobre la participación así como la valoración de actividades en su instituto y en su barrio.

En cuanto a las herramientas de recogida de información, se puede decir que es un estudio de tipo descriptivo. Donde recopilar testimonios orales o escritos, con el fin de averiguar hechos, actitudes y opiniones.
La metodología más adecuada que se ha utilizado como recogida de información es un estudio por encuesta.  El tipo de encuesta que se ha seleccionado es el "cuestionario de convivencia y participación".


Este cuestionario muestra las dos variables de convivencia y participación y los distintos indicadores en relación con cada una de ellas.

Respecto a la dimensión temporal y geográfica del estudio, se hizo en los años 2009 y 2011, precisamente 10 institutos y 6 barrios en el municipio de Sant Boi de Llobregat (Barcelona).

En las unidades de análisis del estudio se destaca que la muestra es de 1296 jóvenes entre los 13 y los 18 años, este conjunto de personas se distribuye de forma equilibrada con un 52% de chicos y un 48% de chicas de la ESO, precisamente un 52% de tercero y el resto de la muestra de cuarto. La mayor parte del alumnado han nacido en Cataluña, un 15,6% en otros lugares de los cuales la mayoría son de Latinoamérica,   un 3,4% del Magreb y de otras comunicades de España un 2,5%. Y en menor proporción provienen de Asia y de la Unión Europea.

En cuanto a los resultados de la convivencia podemos ver que las opiniones del alumnado son muy variadas respecto a la relación que tienen con otras personas de diferentes culturas en el barrio.


En esta tabla se muestran los porcentajes de respuesta por género a cuestiones de convivencia con otras culturas en el barrio. Se observa que mayoritariamente los jóvenes y mayoritariamente los chicos tienen una visión poco positiva de la diversidad cultural.
En cuanto a los porcentajes del alumnado según el lugar de nacimiento se destaca que el lugar de nacimiento de los jóvenes es un elemento clave para sus relaciones, teniendo más amistad con otros jóvenes de su mismo origen.



En cuanto a los resultados de la participación ofrece diferencias significativas en función del origen.


También se destaca en el concepto de participación las razones para hacerlo y para no hacerlo mediante una serie de preguntas a ambos sexos. Las chicas tienden más que los chicos a elegir razones "humanitarias y de diversión", mientras que los chicos destacan mayoritariamente en "participar para estar con otros jóvenes que piensan como yo " y "participar porque sus amigos lo hacen". En cuanto a las razones de no participar los jóvenes señalan la falta de tiempo y de interés, que son los más frecuentes.

Por último las principales conclusiones en cuanto a la convivencia se destacan,
- La juventud manifiesta una actitud de coexistencia y no de convivencia ante la diversidad cultural.
-Los jóvenes en general manifiestan tener un mayor número de amistades con otros jóvenes de la misma cultura.
-El colectivo de las chicas e inmigrantes tienen una perspectiva más favorable hacia la convivencia con otras culturas.
Y las conclusiones principales en cuanto a la participación:
-El concepto que tienen los jóvenes de participación es bastante amplio: más de la mitad valoran el interés, el voluntarismo o la implicación para resolver situaciones.
-El bajo nivel de participación en los jóvenes, se apunta a causas como el desinterés, la pasividad, la comodidad y la baja motivación. 
-Más de la mitad de los jóvenes participan en alguna entidad, mayoritariamente clubes deportivos. 
-Las motivaciones para tal participación son en gran medida por razones de diversión.